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| Maria Dora Sibrian junto a Su hija Miram, luego del emotivo encuentro, en que ambas esperaron 32 años para volverse a ver |
Por: Jehovany Rodriguez / prensasensunat@gmail.com / Local
Jueves, 25 de octubre 2012
El reencuentro entre madre e hija ocurrió el martes en la casa de María Dora, ubicada en el municipio de Acajutla departamento de Sonsonate.
Sibrián fue separada de su familia durante el incidente conocido como masacre de Las Aradas o del Sumpul, ocurrida en mayo de 1980, en el contexto de la guerra civil.
Según testimonios, María Doris y su familia –compuesta por su esposo y cinco hijos– tuvieron que huir hacia la frontera de Honduras para poder salvarse. Y aunque todos lograron sobrevivir a la masacre, cuando intentaron retornar a su hogar, patrullas de defensas civiles mataron al padre de los niños.
Por temor a ser asesinada, María Doris huyó nuevamente, solo que en esta ocasión tres de sus hijos desaparecieron durante el intento de ponerse a salvo. Rosa Miriam, de nueve años, fue una de los niños que se perdió.
Sibrián fue separada de su familia durante el incidente conocido como masacre de Las Aradas o del Sumpul, ocurrida en mayo de 1980, en el contexto de la guerra civil.
Según testimonios, María Doris y su familia –compuesta por su esposo y cinco hijos– tuvieron que huir hacia la frontera de Honduras para poder salvarse. Y aunque todos lograron sobrevivir a la masacre, cuando intentaron retornar a su hogar, patrullas de defensas civiles mataron al padre de los niños.
Por temor a ser asesinada, María Doris huyó nuevamente, solo que en esta ocasión tres de sus hijos desaparecieron durante el intento de ponerse a salvo. Rosa Miriam, de nueve años, fue una de los niños que se perdió.
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